Me iba a ir sin decir adiós… pero no habría sido justo.
Tengo una más que evidente falta de motivación y, si no cierro definitivamente este blog, es porque confío en que la inspiración regrese algún día (debió irse a por tabaco y se habrá perdido la pobre). Siguiendo mis propios consejos me limitaré a no actualizar durante un tiempito, pero no lo voy a eliminar.
Os prometo que estoy bien, no es más que una crisis bloguera.
...Besitossssssssssss...
Carmen